Motricidad fina y escritura

La motricidad fina es la coordinación de músculos, huesos y nervios para producir movimientos pequeños y precisos.

Este tipo de motricidad es la que precisamos para poder escribir (hacer los dibujos de las letras). La escritura es un conjunto entre la motricidad fina y los procesos mentales que hacen que memoricemos las grafías, que sepamos cual necesitamos en cada momento, regalas…

Es muy importante desarrollar de forma correcta la motricidad fina ya que juega un papel fundamental en el desarrollo de la inteligencia. El nivel de control en los niños se utiliza para determinar su edad de desarrollo. Los niños desarrollan destrezas de motricidad fina con el tiempo.

Este aprendizaje se caracteriza por presentar altibajos, a pesar de que requiere un ciclo progresivo. Es importante NO alarmarnos si vemos que el niño pasa por algún altibajo (tanto picos importantes de progresos, como retrocesos en el desarrollo). Los dos casos forman parte del ciclo de adquisición y desarrollo de la psicomotricidad fina.

Evolución de la motricidad fina por edades

El reflejo prensil: 0 a 2 meses está presente en las manos del recién nacido este reflejo. Aparece cuando se roza su palma, cerrará el puño en un acto inconsciente. Este reflejo desaparece alrededor de los cinco meses. Toda esta etapa se caracteriza por la falta de control sobre sus manos.

A los 2 meses comenzará a descubrir y a jugar con sus manos. Al principio, solamente descubrirá las sensaciones del tacto.

Coordinación ojo-mano/ “ensayo y error”: de 2 a 4 meses comienza a desarrollarse. Así empieza una etapa de práctica, que sucede al ver los objetos y tratar de agarrarlos con las manos.

“Máximo nivel de alcance”: de 4 a 5 meses la mayoría de los bebés pueden agarrar un objeto que esté a su alcance, mirando solamente el objeto y no sus manos.

De 6 a 9 meses comienzan a ser capaces de sostener un objeto entre sus manos, aunque Habitualmente se les caiga. Aquí comienzan a coger el gusto, la manía… como queramos llamarlo, de coger un objeto y metérselo en la boca.

De 9 a 12 meses prefiere observarlos objetos antes de agarrarlos con sus manos. Comienzan a señalar.

De 12 a 15 meses: Ahora es uno de los avances importantes, conseguir la “pinza” usando en dedo índice y el pulgar para coger los objetos más pequeños.

De 1 a 3 años: Aprenden a jugar con las construcciones, los bloques, puzles… pasar las hojas de un cuento

De 3 a 4 años ¡EMPIEZA EL COLE! Y ahora ya deben ser más autónomos aprendiendo a atarse las zapatillas, coger las pinturas y colorear sin salirse, hacer figuras con el lápiz más identificables que los garabatos para representar objetos, utilizar los cubiertos, jugar con la plastilina, recortar con tijeras, punzones…

A los 4 años: empiezan con el proceso de aprendizaje de la lecto-escritura, aprendiendo a reconocer y dibujar las vocales. También aprenden a dibujar su nombre.

A los 5 años: ya saben cortar, pegar y trazar formas. En muchos colegios, a esta edad ya saben leer y escribir palabras familiares. Adquieren fuerza y presión en los trazos.

La etapa de primaria: de 6 a 12 años En esta etapa conseguirán definir su grafía y adquirir la letra característica de cada uno.

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